Ala rota, ángel que guarda.
No saben acariciar sin el guante blanco del miedo.
Privilegios de la risa, viejo y creyente testigo.
Signo bendito, alegría, dulce fruto eterno en estación sus labios.
Soledad, jardín imperial protegido con la espina de la soberbia.
Visten días con la azul estrella.
Se acostó a dormir en sus vientres la plegaria, la tinta del poeta callado.
J.
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